Es 4 de Octubre y parece verano, el día está despejado y no hace frío a pesar de estar a 1290m. de altitud.
El paseo es muy agradable porque estamos en la montaña lucense, acompañados por abedules, castaños y algún serbal del cazador como el de la fotografía de abajo, que muestra sus bonitas bayas como reclamo para los pájaros.
El camino baja continuamente hasta Triacastela (665m.) pero en ningún momento se hace desagradable porque la pendiente es muy suave.Llegados a este punto hay dos alternativas: Ir por Samos y así podemos ver su famoso monasterio, o ir por San Xil que son 6km. menos y la ruta más montañera, por ir a traves del bosque. Escojo ir por San Xil, el monasterio ya lo he visto al pasar con el coche delante de él esta mañana.
Me encuentro con un paisano entrado en años, que está trabajando la huerta, y al preguntarle si voy bien me responde que sí y a continuación añade, al verme sólo,
- ¡¡¡ Debería usted llevar compañía !!! y con una sonrisa pícara apostilla: ¡¡¡ Una buena compañía !!! Lo que quizás no sepa el buen hombre es que es muy difícil ir mejor acompañado que yo en estos momentos : Un cielo azul, la sombra de un árbol, y la paz conmigo mismo.
La variante de San Xil es todo un acierto; voy por corredores rodeado de castaños y robles que están tirando las castañas y bellotas y está el suelo plagado de ellas, incluso alguna me cae en la cabeza, pero no importa.
En algún momento parece que estamos en un túnel de árboles verdaderamente hermoso
El itinerario asciende hasta los 896m. del Alto de Riocabo para ir perdiendo altura poco a poco hasta Sarria (435m), donde nos recibe el monumento al peregrino
Hay que echarle mucha imaginación para ver un peregrino en la estatua.A las 4 llegamos al albergue despues de 7h.45' de agradable paseo
No hay comentarios:
Publicar un comentario